Mamás y mamis hay muchas, sin duda, pero estas mamá y mami son casi una especie en extinción, ¡son madres de 6 hijos! Y pensándose dar a luz un séptimo.
Leímos esta entrevista en la revista MíraLES y nos dieron permiso para compartirla.
Queremos presentarte a Raquel y Susana, dos mujeres muy valientes:
«Me llamo Raquel, tengo 45 años, trabajo de responsable en una empresa de marketing de Lunes a Viernes, de 6 de la mañana a 14. ¡Muy osada con el horario!
Susana tiene 38 años, estudió derecho pero no ejerce y ahora es autónoma, y es la que tira todas las mañanas ella sólita de la casa hasta que llego yo y ya dividimos el trabajo.
Nos conocimos hace 15 años en el chat de Chueca.com, no vivíamos cerca. Yo soy Vasca y Susana es de Pamplona.
Pasamos varios meses hablando y hablando hasta que por fin un día convencí a Susana de conocerme en persona. La fiesta del día del Orgullo LGTB fue la excusa perfecta para conocernos.
Ese fue el principio de la historia.
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Yo tenía muy claro que quería ser mamá y lo hablé con Susana. A ella también le encantan los niños así que la única traba que podía separarnos nos unió más.
Empezamos a investigar para hacerme la inseminación por Osakidetza (Seguridad Social) pero nos decían que como pareja no… como madre soltera y eso no nos gustó nada..
Tardamos mucho en conseguir que nos admitiesen como pareja, pero lo conseguimos.
Así llegó nuestro primer hijo. Tras 9 meses de vómitos y un parto un poco largo… 26 horas, llegó él. Le pusimos de nombre Aimar y a los meses Susana consiguió adoptarlo (tuvimos que pasar por el proceso) y ya por fin éramos legalmente mamás las dos.
Nuestro segundo hijo fue más elaborado, Susana tuvo problemillas y fue en la privada y por invitro
Ese sería nuestro segundo hijo y le llamamos Javier.
Mientras Susana estaba embarazada me llamaron de Osakidetza y no podíamos decir que no porque ya no tendría otra oportunidad, así que me quedé embarazada del tercero.. Adrian.
¡Dios qué locura! pensaréis! Pero estábamos encantadas, tanto que sentíamos que nos faltaba la niña.
Cómo dejamos embriones congelados nos decidimos a un segundo embarazo de Susana y llegó la niña, Paula.
Pero bueno ya con 4 y metidas en faena nos lanzamos a por el quinto… pero no, fueron 5° y 6° ¡Ayala y Rubén!
Así pasamos de ser 2 en casa a ser 8.
Nuestra vida es organización y mucha falta de tiempo. Si el día tendría 28 horas aún nos faltarían mas.
En el colegio nunca nos han puesto pegas. Era uno de los miedos… Aimar tiene ya 12 años, así que no había mucho donde comparar de cómo hacer o no… Nos hemos sentido respetadas y tratadas igual que cualquier otra pareja.
Sin embargo y muy a nuestro pesar si que hemos tenido alguna situación fuera que no hubiera sido deseada.
Por ejemplo este otoño en Portaventura. Cuando nos presentamos como familia numerosa para conseguir el descuento llevamos nuestro libro de familia, el libro de familia numerosa, el DNI y todo lo que piden y nos dice la chica que nos atendía en la taquilla:
– ¿Y como se que son todos hijos vuestros??
– ¿¿Quizás por los documentos oficiales que acabo de darte?? Le contesto yo..
– ¿Y cómo sé que estáis casadas?
– ¿Eso pone en el libro de familia no?
– Ya y cómo sé que sois vosotras…
– Quizás con el DNI…
Así pasamos más de 30 minutos discutiendo. Yo ya empezaba a perder los nervios..
Imaginaros la situación: 6 niños, 4 de ellos deseando entrar en Portaventura. La chica venga preguntar… ellos venga preguntar ¿porqué dice que si somos hijos vuestros Queremos ya entrar. Nos aburrimos… Y la cola de gente que iba en aumento.
Yo ya encendida le digo:
– ¿Crees que me traigo a tooodos los niños de mi pueblo diciendo que son hijos nuestros? ¿Estas dudas o preguntas se las haces a todo el que te dice que es familia numerosa?
Y ya veía que yo me iba calentando hasta que por fin nos dejó entrar.
Yo creo que esa es de las peores situaciones que hemos vivido.
Al entrar nos presentamos en atención al cliente donde su respuesta fue… ‘ya estáis dentro, ¿no?’
Bien por Portaventura…
Pero habíamos ido a que los niños pasasen un día genial (y nosotras claro) y no quisimos discutir más y que el recuerdo que tuvieran de ese día no fuera como demostrar que nuestros hijos son nuestros… así que hicimos de tripas corazón y tragando nuestro orgullo, por el bien de lo más valioso que tenemos, disfrutamos mucho del día.
Por supuesto que la gente critica… pero creemos que siempre es así. No por ser lesbiana.. de otras personas se critica si se compra coche y de otro si se cambia de casa. Así que si a alguien no le gusta nuestra familia no tiene más que mirar a otro lado y olvidarnos. ¿No creéis?
La verdad que a la cara no suelen decirnos nada malo, al contrario, suelen decirnos que somos dignas de admiración y valientes al tener 6 hijos… y no descartamos un 7… así que ya si alguien opina que estamos locas veremos con 7
Un día mi mujer llevando a Adrián y a Javier en la misma silla gemelar dado que se llevan 11 meses, le dice una señora:
– El morenito no (Javier parido por mi mujer también morena) pero el rubio (Adrián parido por mi) ese es clavadito a ti, ¿este es tuyo verdad??
– Señora los dos son hijos míos, pero si lo que quieres saber es a cual he llevado dentro ha sido justo al morenito…
– Ah vaya pues el rubito es clavado a ti
– Bueno si es eso lo que piensas realmente…
Y así corto el tema.
En nuestra vida tenemos que estar muy compenetradas, tenemos que tener mucho control con los horarios porque siempre hay algo que hacer aparte del colegio.. Balonmano, hip hop, gimnasia rítmica, multideporte…vamos, que no paramos.
No tenemos tiempo ni ganas de perderlo en ver si a alguien no le gusta que seamos dos mamás de 6 preciosidades de niños. Ese tiempo lo invertimos en ser felices junto a ellos.
Ellos dicen que no les gustaría estar en otra familia así que mal no lo estaremos haciendo… Son niños felices, libres y educados en la igualdad.
Les hablamos de cómo han llegado a nuestras vidas.
Javier un día nos dice:
Mami (así llaman a Susana), yo he estado en tu tripa y me parezco muchísimo a ti… pero me gusta todo lo que le gusta a la ama (así me llama a mi) así que tengo un poco de cada una… nos dio un besazo y un abrazo que no se paga con dinero.
¿Quieres seguir a esta preciosa familia en Instagram? Aquí te dejamos su cuenta: amaymamide6.
